top of page
  • Foto del escritorRecto Verso | Editor

ACQUA, nuevo


Agua del mundo,

líquido en llanto,

alma de lo humano.

Nos cuesta pensar en líquido:

elemento cristalino, lúcido y vital.


Venimos al mundo entre lágrimas habiendo vivido nueve meses

—266 días— en un medio líquido y por tanto, acuoso.

Somos agua en un setenta por ciento

y nuestras neuronas se comunican entre ácidos grasos y agua,

en un ochenta y cinco por ciento.

Todo órgano, toda esencia vital tiene que ver contigo.


Por ello, escribo este texto en el líquido elemento de mi alma.

Antes que agua fuimos llanto.

No sólo al nacer sino al morir

nos despiden con lágrimas.


Amamos y besamos entre saliva húmeda

y otros fluidos que callo —líquidos también—

que son compartidos entre hormonas, feromonas y abrazos.

De ser algo el sexo es líquido y blando.

Fugaz, dúctil como el agua que a veces dejamos correr.

Ya saben: aquella que no has de beber; mejor déjala correr.


Son tres los signos de agua: Cáncer, Escorpio y Piscis,

gobernados por emociones fuertes y lunares.

Son éstas, personalidades moderadas, ostracistas y loables

que se deslizan ocultas, sin cauce; de metal extraño…


El agua, líquido elemento usado en bautizos, comuniones,

sudor de tantos esfuerzos y símbolo, per se del verano...

El agua es amor y como tal está en todas partes, flotando.


Agua de ríos que nacen y mueren contaminados.

Agua gestionada, tasada, embotellada por necios interesados.

Agua destilada, oxigenada, agua helada y evaporada.


¿Y qué es la humedad relativa sino agua flotando?

Nubes de agua vaticinan tormenta,

arrasan como fuego, devastando tanto como regenerando,

alimentado, apagando.


Son tantos y tantos los usos y encantos del agua.

Sigo: agua sucia que vertimos en los baños

es goteo insoportable otras veces, de grifos nocturnos

que impide dormir al son de un “blog, blog, blog”, insufrible.

Es forma de tortura en guerras y raptos.


Aguas fecales, terrenales, aguas depuradas,

benditas, desatadas o insondables.

Agua matutina de duchas y baños.

Todo es agua y agua devuelve un estómago mareado.


Podría escribir mares de agua sobre “el agua

pero tan sólo me apetece beber a sorbos lentos

ese vaso que dejaste olvidado en mi casa:

H2O enamorado, condensado de amor

y líquido encanto.

13 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

El Perfume

Publicar: Blog2_Post
bottom of page